Una escuela sostenible en Imola
En el barrio de Pedagna de Imola, en una zona de fuerte vocación pública, se levanta la nueva escuela media ecosostenible, un edificio de cuatro plantas (una de ellas completamente subterránea), conectado con las escuelas primarias y diseñado con la intención de minimizar el consumo energético y aprovechar al máximo los recursos medioambientales.
De hecho, el principal objetivo del proyecto del nuevo instituto de enseñanza secundaria L. Orsini era crear un edificio que, además de cumplir los requisitos educativos en cuanto a espacio y forma, fuera un modelo de sostenibilidad medioambiental para los ciudadanos y los usuarios finales.
Los elementos innovadores del proyecto abarcan distintos ámbitos: desde la elección de tecnologías y materiales de construcción hasta la flexibilidad funcional, desde la adaptabilidad a las nuevas tecnologías hasta el proceso de obra, desde el mantenimiento hasta el rendimiento energético del edificio, desde la reducción del consumo hasta el uso de fuentes renovables, desde el reciclaje hasta la eliminación de residuos. Todo ello ha sido posible gracias a la sinergia entre el diseño arquitectónico y el de sistemas y a la fructífera colaboración entre distintos profesionales.
La orientación del edificio determinó la disposición de la parcela y la distribución funcional de los espacios interiores. La captación de la radiación solar fue la principal herramienta para escanear y distribuir las partes opacas y acristaladas y para gestionar la integración entre el organismo del edificio y las distintas tecnologías solares activas adoptadas.
En planta, el edificio se genera por el desplazamiento longitudinal de dos «lamas», que a su vez giran con respecto al eje baricéntrico. Los dos cuerpos están unidos por un gran vestíbulo de tres plantas que contiene los elementos de distribución vertical, totalmente acristalado y con dos entradas principales al este y al oeste. Este elemento central transparente de la escuela se encarga de la iluminación natural cenital y del sistema de extracción de calor.
Para garantizar una continuidad tanto física como pedagógica entre las dos estructuras escolares, se decidió crear un pasillo de enlace que fuera también un espacio de exposición, recreo y relación. Una gran pared acristalada al este y un muro macizo al oeste definen este espacio, cuya longitud viene determinada por la necesidad de evitar que el nuevo edificio haga sombra a la escuela primaria con su sistema fotovoltaico de unos 20 kW pico.
Sistema utilizado
Sistema BIO
Calefacción y refrescamiento por suelo con sistema Bio para un colegio ecosostenible en Imola.